Santo Quinielo Martir.
Santo Quinielo Martir.
Hace 5 o 6 años, un día tomando una cerveza en un bar, mientras esperaba a unos amigos puede escuchar una conversación a la que no di mucho crédito, pero ayer por la noche tomando unas copas y hablando de quinielas me cuentan esa historia otra vez, a la que sigo sin dar demasiado crédito, pero que parece ser real, aunque la verdad tampoco me he molestado en intentar verificarla, es la siguiente:
A finales de la década de los sesenta o principios de los setenta en uno de los múltiples pueblos que se desperdigan a lo largo de la Alcarria, no me pudieron decir exactamente de cual se trata, pero bueno el caso es que a un quinielista de unos cuarenta años, y después de toda una vida de penurias le sonríe la fortuna y acierta un catorce de unas novecientas y pico mil pesetas, no llega al millón, pero toda una fortuna en aquellos tiempos, y este pobre hombre consciente del final de sus días a causa de una penosa enfermedad que sin tenerle postrado en la cama ha puesto fecha al fin de su existencia decide acabar sus días de la siguiente forma al no tener familia alguna a quien poder dejar su tardía fortuna.
De lunes a miércoles son días de reposo y abstinencia para recuperar las fuerzas necesarias para poder cumplir.
De jueves a domingo el procedimiento era el siguiente, levantarse el jueves a primera hora, desayunar y llamar al único taxi existente en el pueblo para ir a Madrid, comprar el mas caro y explendoroso traje de la mejor tienda de la capital y después de comer volver al pueblo donde el taxista lo dejaba en el puticlub de las afueras, marchándose con la orden de no volver hasta el domingo a las 10 de la noche en que empezaba el reposo y la abstinencia hasta el jueves siguiente. Hoy en día sigue siendo recordado como Santo Quinielo Mártir, tanto por su fortuna como por el inagotable apetito que dicen las malas lenguas que tenia. El pobre murió tres meses después con 22.000 pesetillas en el bolsillo, era todo lo que le quedaba. El próximo día 9 dicen que es su aniversario y se le recuerda todos los años brindando a su salud con una copita de chinchon y recitando su oración:
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a acertar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a un catorce sacar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Para así poderlo celebrar
Y a todos mis amigos poder invitar.
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a acertar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a un catorce sacar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Porque a tu salud vamos a brindar
Y en tu honor 14 polvos vamos echar.
Y como es normal acabamos brindando a su salud y esperando que este fin de semana caiga ese catorce, si no es a mi que sea en el foro, y al que le toque no se olvide ni el brindis ni los 14 polvetes en su honor, porque también dicen que tenia muy mala leche, que no se nos vaya a mosquear.
A finales de la década de los sesenta o principios de los setenta en uno de los múltiples pueblos que se desperdigan a lo largo de la Alcarria, no me pudieron decir exactamente de cual se trata, pero bueno el caso es que a un quinielista de unos cuarenta años, y después de toda una vida de penurias le sonríe la fortuna y acierta un catorce de unas novecientas y pico mil pesetas, no llega al millón, pero toda una fortuna en aquellos tiempos, y este pobre hombre consciente del final de sus días a causa de una penosa enfermedad que sin tenerle postrado en la cama ha puesto fecha al fin de su existencia decide acabar sus días de la siguiente forma al no tener familia alguna a quien poder dejar su tardía fortuna.
De lunes a miércoles son días de reposo y abstinencia para recuperar las fuerzas necesarias para poder cumplir.
De jueves a domingo el procedimiento era el siguiente, levantarse el jueves a primera hora, desayunar y llamar al único taxi existente en el pueblo para ir a Madrid, comprar el mas caro y explendoroso traje de la mejor tienda de la capital y después de comer volver al pueblo donde el taxista lo dejaba en el puticlub de las afueras, marchándose con la orden de no volver hasta el domingo a las 10 de la noche en que empezaba el reposo y la abstinencia hasta el jueves siguiente. Hoy en día sigue siendo recordado como Santo Quinielo Mártir, tanto por su fortuna como por el inagotable apetito que dicen las malas lenguas que tenia. El pobre murió tres meses después con 22.000 pesetillas en el bolsillo, era todo lo que le quedaba. El próximo día 9 dicen que es su aniversario y se le recuerda todos los años brindando a su salud con una copita de chinchon y recitando su oración:
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a acertar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a un catorce sacar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Para así poderlo celebrar
Y a todos mis amigos poder invitar.
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a acertar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Ayúdame a un catorce sacar
Santo Quinielo Mártir, Santo Quinielo Mártir,
Porque a tu salud vamos a brindar
Y en tu honor 14 polvos vamos echar.
Y como es normal acabamos brindando a su salud y esperando que este fin de semana caiga ese catorce, si no es a mi que sea en el foro, y al que le toque no se olvide ni el brindis ni los 14 polvetes en su honor, porque también dicen que tenia muy mala leche, que no se nos vaya a mosquear.
- Antonio Gea
- 15
- Mensajes: 10741
- Registrado: Mié 15 Oct, 2003 11:25 pm
Si los 14 en la quiniela son 200 euros y los 14 polvetes son con Pamela Anderson, como queme quedo con lo segundo.... todo es relativo en esta vida amigo SergioH... je.
Salute!!
Salute!!
"Ser uno mas resistiría a la idea de serlo, yo quiero ser yo, como aca me ves enredado en estas redes queriendo ser yo..."